A finales del pasado mes de marzo, SETEM lanzó a través de internet su campaña “Error 104, error en el sistema”: www.error104.com.
Es el momento de cambiar el sistema con las Finanzas Éticas. Actúa
19-04-2009 - El punto de partida es un dinámico vídeo de lenguaje sencillo y directo que se hace eco de un error cometido por algunos medios de comunicación, que en su día publicaron que si se repartiera el plan de ayuda a los bancos del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, entre todos los habitantes del planeta, cada uno tocaría a 104 millones de dólares. En realidad la cifra es mucho menor, ya que serían sólo 104 dólares por persona. ¿Pero qué pasaría si se invirtieran esos 104 dólares por habitante mundial en las finanzas éticas? SETEM afirma que sería un eficaz medio para combatir las desigualdades y las injusticias provocadas precisamente por la banca convencional, una de las grandes culpables de la actual crisis económica. Por tanto, el verdadero error no está en el cálculo, sino en el sistema financiero. Hablamos de ello con la responsable de comunicación de SETEM Finanzas Éticas, Marta Isabel González, y Annie Yumi Joh, responsable de Finanzas Éticas en SETEM.
Noticias Positivas: La campaña quiere provocar una reflexión en las personas haciéndoles una pregunta muy sencilla: ¿qué se podría hacer con esos 700.000 millones de euros inyectados por EE. UU. para la banca comercial si su fin fuera ayudar a la gente a través de las finanzas éticas?
Annie Yumi Joh: Lo que desde SETEM queremos transmitir con la campaña “Error104, error en el sistema” es que no podemos quedarnos en las cifras y no podemos dejar que otros decidan por nosotros qué es lo que hay que hacer con el dinero. SETEM quiere centrar la atención de la ciudadanía en uno de los grandes problemas del modelo de globalización actual: la obsesión casi exclusiva en el precio. Todo el mundo, desde los bancos hasta los gobiernos y la sociedad en su conjunto, nos hemos olvidado de que cada producto tiene un coste medioambiental y un coste social. Tenemos que preguntarnos, si unos vaqueros cuestan 6 euros, ¿en qué condiciones laborales habrán sido fabricados? de la misma manera, ¿nos conformamos con que ING nos dé una alta rentabilidad cuando a su vez ha invertido 262.870 millones de dólares en la mina Freeport en Indonesia, una mina que ha vertido 230.000 toneladas de cobre, arsénico y mercurio en el río Aghawagon? ¿nos conformamos a pesar de que trabaja en países con regímenes dictatoriales?
Marta Isabel González: Hoy existen ya alternativas reales y efectivas para lograr humanizar el dinero, financiando únicamente proyectos que sean rentables en términos económicos, sociales y ambientales. Realmente se puede cambiar el mundo con nuestras decisiones cotidianas y las finanzas éticas son el modo de consumo responsable de productos financieros que promovemos desde SETEM.
N+: Otro objetivo de SETEM con esta campaña es movilizar a la ciudadanía para que exija cambios a los líderes políticos. A través de la web de Error104, todo el que quiera puede mandarle una carta al presidente Rodríguez Zapatero. ¿Qué es lo que se le pide al jefe del ejecutivo español?
AYJ: Teniendo en cuenta que Rodríguez Zapatero será presidente de la Unión Europea en enero de 2010 creemos que tiene una magnífica oportunidad para crear una economía más sólida, segura y sostenible, y por eso queremos que ponga toda su energía en una serie de cuestiones. La primera es garantizar una total transparencia de las instituciones financieras, productos financieros y multinacionales y hacer pública su gestión. También es necesario erradicar los paraísos fiscales, sobre todo los que comparten frontera con España, como Andorra y Gibraltar. Además, debe establecerse una mayor regulación y hay que poner en marcha mecanismos globales de control de los bancos e instituciones financieras. Otro tema esencial es asegurar la participación de los países empobrecidos en el debate, poniendo a las Naciones Unidas en el seno de la reforma. Por último, hay que invertir en la economía solidaria y apostar por la banca ética, creando empresas y empleos sostenibles.
N+: En el vídeo de la campaña, que también se puede ver a través de Noticias Positivas, se denuncian los efectos perniciosos de muchas de las inversiones de la banca convencional para la sociedad. ¿Es posible que las ayudas otorgadas a los bancos vayan a parar a alguna de estas actividades?
AYJ: Una vez más la falta de control de las instituciones financieras es evidente: no se sabe a ciencia cierta cómo se utilizará el dinero de las ayudas. Es importante que el gobierno emplee el dinero público para el bien público. En este sentido, tiene que asegurar que las entidades que reciben dinero público procedente de impuestos recaudados en el pasado, presente y el futuro, trabajen por el bien común de la sociedad, no sólo el de los altos ejecutivos. Lo que no debe volver a ocurrir es una situación similar a la que ocurrió hace unas semanas: el reparto de 128 millones de euros en primas a los ejecutivos de la aseguradora estadounidense AIG a pesar de que ésta había recibido una ayuda de más de 130.000 millones de euros por parte del Tesoro de EE. UU. y la Reserva Federal.
Además, el Director Ejecutivo de la Oficina de Drogas y Crimen de las Naciones Unidas (UNOCD, por sus siglas en inglés) comentó que el único capital disponible cuando estalló la crisis fue dinero procedente de tráfico de drogas.
MIG: Lo que sabemos es que la banca tradicional carece de la transparencia mínima indispensable para poder saber lo que hacen con el dinero que les damos o con el dinero que se les está insuflando por parte de los gobiernos. En teoría ese dinero que se les está otorgando es para reactivar el crédito y de la economía, pero en la práctica no es posible saber en qué proyectos lo están invirtiendo.
N+: ¿Pueden poner algún ejemplo de actividad especialmente perniciosa financiada por la banca comercial?
AYJ: A través del trabajo que SETEM realiza junto a la red internacional BankTrack, en la que se engloban decenas de ONG especializadas en observar y vigilar a los bancos, tenemos demasiados ejemplos de actividades e inversiones negativas para la sociedad. Por poner los ejemplos que más conocemos desde SETEM y que se refieren a bancos españoles, sabemos que el BBVA y el Santander financian a las empresas propietarias del HidroAysen, empresa que quiere construir presas que inundarán más de 4.300 hectáreas en la Patagonia Chilena. Más de la mitad de la población chilena se opone a la construcción de las presas en la Patagonia por el daño que supondrían al medioambiente y a la industria de ecoturismo.
MIG: ING financia a Total, empresa que trabaja en Birmania, país con un régimen dictatorial notorio por los abusos de los derechos humanos.
N+: En esta campaña se apuesta por la banca ética. ¿Pueden hablarme de un caso que funcione en España?
AYJ: El Proyecto FIARE, por ejemplo, ofrece al público la posibilidad de abrir un depósito y pedir un préstamo. La gran diferencia del Proyecto FIARE con otras alternativas es la total transparencia de su gestión financiera. Cualquier usuario puede entrar en su página web y conocer todos los préstamos concedidos. Si todas las entidades financieras hicieran pública su gestión financiera y realmente invirtieran en empresas que no explotasen a sus trabajadores ni utilizasen los recursos naturales como mercancía, podrían impulsar un verdadero cambio positivo para la sociedad.
MIG: Desde SETEM entendemos que la factura de la crisis financiera se ha pasado a la economía real. Los bancos se alejaron de su función inicial de guardar y prestar dinero. La banca ética, desde su inicio, ha servido al interés común, prestando dinero a las personas que más lo necesitan, no a las que ya lo tienen.
N+: Por último, ¿cuál piensan que es la principal baza de vuestra campaña para hacer llegar todos estos mensajes a la gente?
MIG: Creemos que esta campaña tiene un sabor diferente, muy joven, muy actual y a la vez que se entiende perfectamente. El lenguaje es novedoso y se aleja de la comunicación típica de las ONG, haciendo que la propuesta sea creativa e invite a la reflexión
Noticias Positivas: La campaña quiere provocar una reflexión en las personas haciéndoles una pregunta muy sencilla: ¿qué se podría hacer con esos 700.000 millones de euros inyectados por EE. UU. para la banca comercial si su fin fuera ayudar a la gente a través de las finanzas éticas?
Annie Yumi Joh: Lo que desde SETEM queremos transmitir con la campaña “Error104, error en el sistema” es que no podemos quedarnos en las cifras y no podemos dejar que otros decidan por nosotros qué es lo que hay que hacer con el dinero. SETEM quiere centrar la atención de la ciudadanía en uno de los grandes problemas del modelo de globalización actual: la obsesión casi exclusiva en el precio. Todo el mundo, desde los bancos hasta los gobiernos y la sociedad en su conjunto, nos hemos olvidado de que cada producto tiene un coste medioambiental y un coste social. Tenemos que preguntarnos, si unos vaqueros cuestan 6 euros, ¿en qué condiciones laborales habrán sido fabricados? de la misma manera, ¿nos conformamos con que ING nos dé una alta rentabilidad cuando a su vez ha invertido 262.870 millones de dólares en la mina Freeport en Indonesia, una mina que ha vertido 230.000 toneladas de cobre, arsénico y mercurio en el río Aghawagon? ¿nos conformamos a pesar de que trabaja en países con regímenes dictatoriales?
Marta Isabel González: Hoy existen ya alternativas reales y efectivas para lograr humanizar el dinero, financiando únicamente proyectos que sean rentables en términos económicos, sociales y ambientales. Realmente se puede cambiar el mundo con nuestras decisiones cotidianas y las finanzas éticas son el modo de consumo responsable de productos financieros que promovemos desde SETEM.
N+: Otro objetivo de SETEM con esta campaña es movilizar a la ciudadanía para que exija cambios a los líderes políticos. A través de la web de Error104, todo el que quiera puede mandarle una carta al presidente Rodríguez Zapatero. ¿Qué es lo que se le pide al jefe del ejecutivo español?
AYJ: Teniendo en cuenta que Rodríguez Zapatero será presidente de la Unión Europea en enero de 2010 creemos que tiene una magnífica oportunidad para crear una economía más sólida, segura y sostenible, y por eso queremos que ponga toda su energía en una serie de cuestiones. La primera es garantizar una total transparencia de las instituciones financieras, productos financieros y multinacionales y hacer pública su gestión. También es necesario erradicar los paraísos fiscales, sobre todo los que comparten frontera con España, como Andorra y Gibraltar. Además, debe establecerse una mayor regulación y hay que poner en marcha mecanismos globales de control de los bancos e instituciones financieras. Otro tema esencial es asegurar la participación de los países empobrecidos en el debate, poniendo a las Naciones Unidas en el seno de la reforma. Por último, hay que invertir en la economía solidaria y apostar por la banca ética, creando empresas y empleos sostenibles.
N+: En el vídeo de la campaña, que también se puede ver a través de Noticias Positivas, se denuncian los efectos perniciosos de muchas de las inversiones de la banca convencional para la sociedad. ¿Es posible que las ayudas otorgadas a los bancos vayan a parar a alguna de estas actividades?
AYJ: Una vez más la falta de control de las instituciones financieras es evidente: no se sabe a ciencia cierta cómo se utilizará el dinero de las ayudas. Es importante que el gobierno emplee el dinero público para el bien público. En este sentido, tiene que asegurar que las entidades que reciben dinero público procedente de impuestos recaudados en el pasado, presente y el futuro, trabajen por el bien común de la sociedad, no sólo el de los altos ejecutivos. Lo que no debe volver a ocurrir es una situación similar a la que ocurrió hace unas semanas: el reparto de 128 millones de euros en primas a los ejecutivos de la aseguradora estadounidense AIG a pesar de que ésta había recibido una ayuda de más de 130.000 millones de euros por parte del Tesoro de EE. UU. y la Reserva Federal.
Además, el Director Ejecutivo de la Oficina de Drogas y Crimen de las Naciones Unidas (UNOCD, por sus siglas en inglés) comentó que el único capital disponible cuando estalló la crisis fue dinero procedente de tráfico de drogas.
MIG: Lo que sabemos es que la banca tradicional carece de la transparencia mínima indispensable para poder saber lo que hacen con el dinero que les damos o con el dinero que se les está insuflando por parte de los gobiernos. En teoría ese dinero que se les está otorgando es para reactivar el crédito y de la economía, pero en la práctica no es posible saber en qué proyectos lo están invirtiendo.
N+: ¿Pueden poner algún ejemplo de actividad especialmente perniciosa financiada por la banca comercial?
AYJ: A través del trabajo que SETEM realiza junto a la red internacional BankTrack, en la que se engloban decenas de ONG especializadas en observar y vigilar a los bancos, tenemos demasiados ejemplos de actividades e inversiones negativas para la sociedad. Por poner los ejemplos que más conocemos desde SETEM y que se refieren a bancos españoles, sabemos que el BBVA y el Santander financian a las empresas propietarias del HidroAysen, empresa que quiere construir presas que inundarán más de 4.300 hectáreas en la Patagonia Chilena. Más de la mitad de la población chilena se opone a la construcción de las presas en la Patagonia por el daño que supondrían al medioambiente y a la industria de ecoturismo.
MIG: ING financia a Total, empresa que trabaja en Birmania, país con un régimen dictatorial notorio por los abusos de los derechos humanos.
N+: En esta campaña se apuesta por la banca ética. ¿Pueden hablarme de un caso que funcione en España?
AYJ: El Proyecto FIARE, por ejemplo, ofrece al público la posibilidad de abrir un depósito y pedir un préstamo. La gran diferencia del Proyecto FIARE con otras alternativas es la total transparencia de su gestión financiera. Cualquier usuario puede entrar en su página web y conocer todos los préstamos concedidos. Si todas las entidades financieras hicieran pública su gestión financiera y realmente invirtieran en empresas que no explotasen a sus trabajadores ni utilizasen los recursos naturales como mercancía, podrían impulsar un verdadero cambio positivo para la sociedad.
MIG: Desde SETEM entendemos que la factura de la crisis financiera se ha pasado a la economía real. Los bancos se alejaron de su función inicial de guardar y prestar dinero. La banca ética, desde su inicio, ha servido al interés común, prestando dinero a las personas que más lo necesitan, no a las que ya lo tienen.
N+: Por último, ¿cuál piensan que es la principal baza de vuestra campaña para hacer llegar todos estos mensajes a la gente?
MIG: Creemos que esta campaña tiene un sabor diferente, muy joven, muy actual y a la vez que se entiende perfectamente. El lenguaje es novedoso y se aleja de la comunicación típica de las ONG, haciendo que la propuesta sea creativa e invite a la reflexión
No hay comentarios:
Publicar un comentario