Comfia CCOO-A cree que el Cabildo de Córdoba y los ex gestores de CajaSur "deberían sentir vergüenza tras las palabras del máximo responsables del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), Javier Aríztegui ayer en el Congreso", el cual calificó la solicitud de intervención como ‘un suicidio’.17-06-2010 - En declaraciones a Europa Press, el Secretario General de Comfia-Andalucía, al hilo de la comparecencia de Aríztegui ayer en el Congreso, afirmó que la misma "no sólo debe llamar a la reflexión de todos los actores que han participado en el proceso sino que si el Cabildo y quienes han participado de su pantomima tienen vergüenza se les debería caer la cara".
"Ayer quedaron absolutamente retratados todos los responsables de la ex cúpula directiva de CajaSur con el viaje a ninguna parte que iniciaron hace diez años y el salto al vacío que han protagonizado el 21 de mayo", añadió el máximo responsable de COMFIA-A, el cual destacó que el FROB "ha desmontado uno a uno, tanto las bondades acerca de la fusión 'fantasma' con CajaMurcia, que hubiera sido más cara para el erario público como la irresponsabilidad de la solicitud de intervención, que el propio Banco de España ha calificado de suicidio".
Precisó que el hecho de que el Banco de España plantee un excedente de plantilla superior al que ya se había conseguido limitar de forma voluntaria en un acuerdo laboral que garantizara los intereses de los empleados de CajaSur "hace aún más grave la actuación de la cúpula directiva de la caja cordobesa y de sus cómplices, el sindicato instrumental Aspromonte, que una vez que se están encontrando huérfanos de quienes lo manejaban es de esperar que al menos empiecen a comportarse como un sindicato por primera vez".
En este contexto, Vicente destacó que una posible investigación sobre responsabilidades legales de gestores de CajaSur "cobra aún mayor importancia tras la comparecencia de Aríztegui y reafirma la exigencia que CCOO viene haciendo hace un año para que se depuren responsabilidades por los diez años de gestión absolutamente irresponsable, hasta llevar a CajaSur al punto actual".
La intervención de Ariztegui
Aríztegui cifró, según fuentes de la subcomisión del FROB presentes en la comparecencia, en "un mínimo de 550 empleados" el recorte necesario en la entidad de ahorro intervenida, lo que supone un despido de 120 trabajadores más de los que hubieran salido de la caja en el último de los escenarios que se barajaron en la fusión con Unicaja. Además, el adjudicatario de Cajasur tendrá potestad para iniciar los recortes por donde y como quiera porque, según las fuentes consultadas, "no habrá compromiso laboral".
"Ayer quedaron absolutamente retratados todos los responsables de la ex cúpula directiva de CajaSur con el viaje a ninguna parte que iniciaron hace diez años y el salto al vacío que han protagonizado el 21 de mayo", añadió el máximo responsable de COMFIA-A, el cual destacó que el FROB "ha desmontado uno a uno, tanto las bondades acerca de la fusión 'fantasma' con CajaMurcia, que hubiera sido más cara para el erario público como la irresponsabilidad de la solicitud de intervención, que el propio Banco de España ha calificado de suicidio".
Precisó que el hecho de que el Banco de España plantee un excedente de plantilla superior al que ya se había conseguido limitar de forma voluntaria en un acuerdo laboral que garantizara los intereses de los empleados de CajaSur "hace aún más grave la actuación de la cúpula directiva de la caja cordobesa y de sus cómplices, el sindicato instrumental Aspromonte, que una vez que se están encontrando huérfanos de quienes lo manejaban es de esperar que al menos empiecen a comportarse como un sindicato por primera vez".
En este contexto, Vicente destacó que una posible investigación sobre responsabilidades legales de gestores de CajaSur "cobra aún mayor importancia tras la comparecencia de Aríztegui y reafirma la exigencia que CCOO viene haciendo hace un año para que se depuren responsabilidades por los diez años de gestión absolutamente irresponsable, hasta llevar a CajaSur al punto actual".
La intervención de Ariztegui
Aríztegui cifró, según fuentes de la subcomisión del FROB presentes en la comparecencia, en "un mínimo de 550 empleados" el recorte necesario en la entidad de ahorro intervenida, lo que supone un despido de 120 trabajadores más de los que hubieran salido de la caja en el último de los escenarios que se barajaron en la fusión con Unicaja. Además, el adjudicatario de Cajasur tendrá potestad para iniciar los recortes por donde y como quiera porque, según las fuentes consultadas, "no habrá compromiso laboral".
Fuente: Comfia CCOO Andalucia
fuente foto: Hazarem
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